jueves, 16 de mayo de 2013


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ORIGEN Y EVOLUCIÓN DEL SER HUMANO





Todas las sociedades necesitan una explicación sobre el origen del mundo y del ser humano. ¿Cuándo y cómo y se produjo la aparición del ser humano sobre la tierra? ¿Cómo eran?
En el ámbito occidental, esta necesidad estuvo cubierta hasta mediados del siglo XIX por la Biblia: el universo y dentro del él, los seres humanos fueron creados por Dios según el Génesis.
Los avances de algunas ciencias naturales durante el siglo XIX como la geología, la biología, la arqueología, plantearon otras corrientes teóricas que pasaron a dominar, como el evolucionismo. Los científicos naturalistas hicieron su aparición, y entre ellos, el más destacado Charles Darwin, enmarcaron su desarrollo en el contexto de una teoría evolucionista.
En 1859, Darwin publicó el libro El origen de las especies en que escribió una nueva teoría: las especies animales y vegetales evolucionaron a través del tiempo. Dentro de esta teoría de la evolución se incluía a los humanos como descendientes de una especie de prosimios, que dio origen a dos ramificaciones: el mono y el hombre. En un principio provocó gran rechazo, pero luego algunos científicos se dedicaron a buscar testimonios que comprobaran esta teoría.
Darwin se refirió al aumento del uso de las herramientas y al cambio en los modos de vida. El paso de la caza y recolección a la agricultura y ganadería. Lo primordial era determinar la antigüedad de los fósiles, la cual fue posible en 1974, cuando el catedrático Lobby, de la Universidad de Chicago, descubrió el método del carbono 14.
PROCESO DE HOMINIZACIÓN

El proceso de hominización es el conjunto de cambios sufridos por el pre humanos a lo largo de aproximadamente unos 5 millones de años o más. Todas estas transformaciones ocurrieron muy lentamente.
LOS PRIMEROS PRIMATES: vivieron en los árboles de las sabanas africanas. Eran mamíferos poseedores de manos con cinco dedos flexibles y pulgar oponible, contaron con un cerebro desarrollado. Hace 40 millones de años los primates dieron origen a los Antropoides que evolucionaron hasta convertirse en hominoides. Estos de ramificaron en Hylobates ( simios menores) y los Póngidos (simios mayores)  u los Homínidos, muy lentamente originaron los primeros homínidos, llamados Australopitecos. Eran de pequeña estatura y bípedos, andaban sobre sus extremidades inferiores, se alimentaban de vegetales y poseían filosos colmillos, adaptados para comer carne de los animales que encontraban muertos o malheridos. Se cree que usaban palos y huesos largos para defenderse. Su capacidad craneal era de 400 a 500 centímetros cúbicos.




Durante el siglo XX los arqueólogos realizaron grandes hallazgos de restos pertenecientes a homínidos, llamados Australopitecos, con una antigüedad entre 2 y 4 millones de años. En 1962 se hallaron en África, en la Garganta de Olduvai, (Tanzania) los restos de un humano de 2 millones años, que fue llamado Homo Hábilis. Por esta razón es que se afirma que África es la cuna de la humanidad.
EN BUSCA DE NUESTROS ANTEPASADOS: los homínidos más antiguos se localizaron en el Valle del Rift y se trata del Sahelanthropues tchadensis, llamado Toumai que vivió hace unos seis millones de años y parece ser bípedo o tal vez caminaba sobre los nudillos de las manos, como los chimpancés actuales
Homo ergaster: el homo habilis evolucionó y dio lugar a esta nueva especie. En algunos de los yacimientos de Turkana, aparecen depositados entre 1.0 y 1.5 millones de años. Tuvieron modificaciones anatómicas sobre todo en el tamaño del cráneo. La mandíbula inferior siguió siendo maciza, sin mentón. Era más alto que su antecesor.




Homo erectus: los descubrieron en Java, en Heidelberg y en Pekín, todos ellos de 1 7000 000 años de antigüedad, eran fósiles Homo (Humanos) pero diferentes de nosotros. Se les llamó Homo erectus porque se comprobó que caminaban erguidos. Era cazador, descubrió el fuego e hizo hachas de manos. Poseían un lenguaje rudimentario.






Reconstrucción plástica de un homo erectus.
Homo sapiens: los primeros huesos pertenecientes a un antepasado del hombre de Neandertal, encontrados en esa región Alemana en 1865.  Hace uno 400.000 años. Son los de mayor volumen craneal conocidos hasta hoy, tenía nariz ancha y la  cavidad nasal grande.






El hombre moderno: en Francia, en1868, se hallaron los restos del hombre de Cromagnon. Este esqueleto pertenecía a un ser humano casi igual al actual.
Entre los hallazgos relacionados con el hombre hay bastones de hueso o de cuerno decorados con esmero, poseía características específicas, estatura alta, robustez, cráneo oval que determinaba una frente ancha y rostro corto. Su anatomía proyectaba un hombre moderno, al igual que su inteligencia plenamente desarrollada. El cambio más trascendental fue el desarrollo de la vida espiritual pues enterraban a sus muertos con rituales y ofrendas.
LAS SOCIEDADES PRIMITIVAS: el proceso de hominización, desde que se encontró el australopitecos, primer antecesor del ser humano hasta el Homo sapiens, abarcó un largo proceso de millones de años. La adaptación al modo de vida de las sociedades primitivas marcó etapas claramente definidas.
La prehistoria es la etapa entre la aparición de los primeros homínidos hace 4 millones de años, y la invención de la escritura, hacia el 4000 aC. Desde la invención de la escritura hasta nuestros días, se denomina historia.
La prehistoria fue dividida en edades según el material empleado por los seres humanos para elaborar sus utensilios: la edad de Piedra y la Edad de los Metales.







La Prehistoria (del latín præ: ‘antes de’, y del griego ιστορία: ‘historia’) es, según la definición clásica, el período de tiempo transcurrido desde la aparición de los primeros homínidos, antecesores del Homo sapiens, hasta que tenemos constancia de la existencia de documentos escritos, algo que ocurrió en primer lugar en el Oriente Próximo hacia el 3300 a. C.; en el resto del planeta, posteriormente.
Según otros autores, la Prehistoria terminaría en algunas regiones del mundo antes, con la aparición de las sociedades complejas que dieron lugar a las primeras civilizaciones y estados.
Es importante señalar que según las nuevas interpretaciones de la ciencia histórica, la prehistoria es un término carente de real significancia en el sentido que fue entendido por generaciones. Si se considera a la Historia, tomando la definición de Marc Bloch, como el «acontecer humano en el tiempo», todo es Historia existiendo el ser humano, y la Prehistoria podría, forzadamente, solo entenderse como el estudio de la vida antes de la aparición del primer homínido en la tierra. Desde el punto de vista cronológico, sus límites están lejos de ser claros, pues ni la llegada del ser humano ni la invención de la escritura tienen lugar al mismo tiempo en todas las zonas del planeta.
Por otra parte, hay quienes defienden una definición de esta fase o, al menos, su separación de la Historia Antigua, en virtud de criterios económicos y sociales en lugar de cronológicos, pues éstos son más particularizadores (es decir, más ideográficos) y aquellos, más generalizadores y por tanto, más susceptibles de proporcionar una visión científica.
En ese sentido, el fin de la Prehistoria y el inicio de la Historia lo marcaría una estructuración creciente de la sociedad que provocaría una modificación sustancial del hábitat, su aglomeración en ciudades, una socialización avanzada, su jerarquización, la aparición de estructuras administrativas, de la moneda y el incremento de los intercambios comerciales de larga distancia.





MODOS DE VIDA DE LAS SOCIEDADES PRIMITIVAS
Paleolítico inferior (el descubrimiento del fuego) vivieron en este período el Homo Hábilis y el Homo erectus. El primero solo se desarrolló en África durante el inicio del Paleolítico inferior y creó  una muy avanzada actividad lítica. El segundo, más inteligente, se adaptó mejor al medio y pudo desplazarse hacia el sur de Europa y Asia.





El hendidor achelense, de apariencia sencilla, pero conceptualmente muy avanzado
Paleolítico medio: (la división del trabajo y la vida espiritual) el tipo humano de este periodo, que pobló África y Euroasia fue el hombre de Neandertal, el primer Homo Sapiens. En África ocuparon la sabana tropical, al ofrecer un clima templado y abundantes fuentes de alimentación. En contraste, Europa y Asia buscaron refugio en cavernas y cuevas por el duro clima de la última glaciación. El trabajo se dividió, así la caza fue una actividad exclusiva de los hombres, para las mujeres, la recolección, el cuido de los niños y los ancianos, la confección de vestimentas de cuero. El cambio más destacado fue el desarrollo de la vida espiritual pues acostumbraban enterrar a los muertos acompañados por ofrendas y objetos de piedra.
Paleolítico superior (el hombre moderno) el hombre de Cromagnon fue muy diferente al de Neandertal, poseía características muy específicas, estatura alta, cráneo oval, rostro corto, robustez. Su anatomía revela a un hombre moderno, al igual que su inteligencia. Nos referimos al Homo Sapiens sapiens, subespecie de la que proviene el hombre actual. Se organizaron en clanes son sus respectivos descendientes, no obstante su organización social fue igualitaria. La caza fue más especializada, crearon armas que les permitieron mayor efectividad y menor riesgo.
El mesolítico: se inició hace 15 000 años. Durante este periodo se produjeron cambios climáticos que implicaron grandes transformaciones en la vida humana,  es el término que se utiliza para denominar el período de la Prehistoria que sirve de transición entre el Paleolítico y el Neolítico. Significa Edad Media de la Piedra (del griego μεσος, mesos=medio; y λίθος, líthos=piedra) por contraposición al Paleolítico (Edad Antigua de la Piedra) y al Neolítico (Edad Nueva de la Piedra), dentificándose con las últimas sociedades de cazadores-recolectores. Los hábitos de las culturas del Mesolítico eran básicamente nómadas, con asentamientos estacionales de invierno y campamentos de verano, aunque en algunas regiones costeras europeas y en el Próximo Oriente (allí donde encontraron recursos suficientes y regulares) comenzaron a vivir de una manera más sedentaria. Esto fue posible gracias a la ampliación del espectro alimentario, que incluyó una gran variedad de alimentos que los especializados cazadores del Paleolítico superior no consumían. Relacionado con estos cambios de dieta estaría la mayor diversificación, especialización y cantidad de utensilios líticos, así como la desaparición de la pintura rupestre figurativa paleolítica, reemplazada por un arte más abstracto.




Punta ahrensburgiense
El final de la glaciación implicó un aumento de la temperatura, el retroceso de la tundra y el avance del bosque hacia otras regiones. Algunos animales migraron hacia el norte en busca de clima frío y otros, como el mamut y el rinoceronte, se extinguieron. La caza se tornó más compleja, ya que los nuevos animales eran más pequeños y con hábitos solitarios. Todas estas manifestaciones forman parte de una etapa de transición entre el Paleolítico y el Neolítico, que hace más complejos su estudio y caracterización.
NEOLITICO
El neolítico significa edad de piedra nueva y el paleolítico edad de piedra vieja Proviene del griego νέος, néos: ‘nuevo’; λίθος, líthos: ‘piedra’. Inicialmente se le dio este nombre en razón de los hallazgos de herramientas de piedra pulimentada que parecían acompañar al desarrollo y expansión de la agricultura. Hoy en día se define el Neolítico precisamente en razón del conocimiento y uso de la agricultura o de la ganadería. Normalmente, pero no necesariamente, va acompañado por el trabajo de la alfarería.











El neolítico se inició hace 8 mil años. Los grupos humanos lograron la domesticación de diversas especies de animales y plantas en diferentes regiones del mundo. La agricultura transformó la forma de vida: de simples cazadores y recolectoras pasaron a realizar la agricultura y el pastoreo. Se cree que este cambio se inicia en el cercano oriente, en la  llamada Media Luna fértil, desde Irán hasta el valle del Nilo y el Jordán. Esta región contaba con animales aptos para la alimentación y factibles de ser domesticados: ovejas, cabras y bueyes. Esta actividad fue realizada por los hombres, mientras que las mujeres perfeccionaban el cultivo de cereales y otras platas: cebada, trigo, la vid, el olivo. Así, fue capaz de producir por primera vez su alimento, a estos primeros agricultores debemos el inicio de la civilización. Durante este periodo el centro de las actividades humanas fue la aldea, en que los grupos humanos pudieron realizar todas sus actividades económicas y sociales.
El arte neolítico: con el desarrollo de la agricultura el ser humano no tenía que desplazarse para buscar su alimento. Parte de ese tiempo se dedicó a otras actividades culturales, políticas y religiosas.
El arte estaba representado por una variedad de manifestaciones: figurillas humanas, túmulos funerarios. El arte comenzó unido a la vida seminómadas de los pastores y finalizó con el descubrimiento del bronce que dio lugar a la era del mismo nombre. Entre lo relevante del arte neolítico tenemos la cerámica, escultura de diosa madres, que fueron adorados, monumentos megalíticos de piedra dedicados al culto religioso. Se ha encontrado cerámica neolítica en todas las regiones ocupadas por los pueblos del Neolítico, desde el cercano oriente a través de África y hasta el Mediterráneo, Europa y las Islas Británicas. En ese período se produjo una deforestación causada por la utilización de la madera para construir viviendas.
Los monumentos neolíticos más destacados fueron los dólmenes (tumbas formadas por grandes bloques de piedra que integran la cámara funeraria) como los grandes círculos de Inglaterra o crómlech cuyo ejemplo más representativo es Stonhenge(3000-1000 a.C) los constructores no usaban herramientas de metal, no conocían la rueda ni la escritura.  Usaban herramientas de piedra, sogas de cuero y troncos de árboles. Los grandes bloques, con un peso de 25 toneladas, fueron trasladados por los hombres, quienes ayudaron con bueyes. El objetivo era invocar las fuerzas sobrenaturales y asombrar, por esta razón los lugares elegidos fueron las cimas de las colinas o los claros del bosque.
La vida en la aldea: durante el neolítico las actividades humanas y el centro de estas fueron en la aldea. Los grupos humanos lograron satisfacer todas sus necesidades sociales y económicas. Surge lo que se llama la especialización del trabajo. Así los miembros se dedicaron a la agricultura, ganadería y otros a las artesanías, quienes fabricaban vasijas de arcilla que luego servirían para almacenar productos. Otros ordeñaban y cuidaban animales. Las mujeres preparaban los frutos para ser guardados y algunos hombres transportaban cereales hacia el granero. El agua era obtenida de un pozo cercano al templo. Dentro de la organización social surgieron los jefes encargados de planificar las actividades más difíciles como la defensa o la construcción de diques y canales.







Fuentes:
•             Castiñeira Morales, Raquel; López Parra, Carlos; Mata Comino, Fernando; Prieto Calonge, María Eugenia (2002). «La Prehistoria». Ciencias Sociales ESO: CURSO 1. Zaragoza: Editorial Luis Vives. ISBN 84-263-4711-8.; Una pequeña introducción sobre la prehistoria, concretamente, sobre el paleolítico en las págs. 118 y 119
Martínez, Francesc A. y Laguna, Antonio (2007). «De nómadas a ciudadanos». La Gran Historia de la Comunitat Valenciana. Valencia: Editorial Prensa Valenciana, S.A.. ISBN 978-84-87502-90-3.
•             Chaline, Jean (1982). El Cuaternario. La historia humana y su entorno. Madrid: Akal Editor. ISBN 84-7339-624-3
•             Chaline, Jean (1982). El Cuaternario. La historia humana y su entorno. Madrid: Akal Editor. ISBN 84-7339-624-3

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